Flota de vehículos totalmente eléctrica.

Desde el principio, smart es sinónimo de concepto de vehículo revolucionario. Por ello, no es de extrañar que la primera generación de 1998 fuera concebida con propulsión eléctrica.

En 2008 se suministraron los primeros 100 smart eléctricos a la ciudad de Londres.

En 2017 se inició el cambio completo a la propulsión eléctrica en los primeros mercados: desde entonces los tres modelos smart están también disponibles en versión eléctrica.

Ese mismo año se presentó en la IAA una visión eléctrica y autónoma para un tráfico de cercanías altamente eficiente y flexible: el smart vision EQ fortwo.

En 2020 llegó el momento: smart continuó de manera coherente el camino iniciado y fue introduciendo sucesivamente en todos los mercados únicamente modelos con propulsión eléctrica por batería.

Con ello, smart se ha convertido en la primera marca de automóviles del mundo en apostar exclusivamente por la tecnología de propulsión eléctrica, abandonando la fabricación de modelos con motores de combustión interna.

El punto de equilibrio.

En la actualidad, la producción de nuestra batería de alto voltaje aún genera más emisiones de CO2 que la producción de modelos de combustión interna equiparables. Fundamentalmente, esto se debe a la compleja fabricación de la batería de alto voltaje y la electrónica de potencia.

No obstante, una vez que tu smart EQ fortwo está en circulación, compensas rápidamente este exceso inicial de emisiones de CO2. Es decir, mientras que con un coche de gasolina seguirías expulsando CO2 de manera continua, puedes recorrer el mismo trayecto con tu coche eléctrico sin emitir nada de CO2. Y, cuantos más kilómetros recorras con tu coche eléctrico, mayor será su efecto positivo sobre el balance de CO2. Puedes compensar el balance negativo tras recorrer unos 16.600 kilómetros con el smart EQ fortwo con electricidad procedente de energía hidráulica. Si recurres al mix energético de la UE, es decir, electricidad procedente de combustibles fósiles y energías renovables, tu smart EQ fortwo deberá recorrer unos 26.800 kilómetros hasta alcanzar el punto de equilibrio. A partir de este momento, tu smart eléctrico circula realmente sin emisiones locales.

Por cierto, considerando el smart EQ fortwo a lo largo de su ciclo de vida completo (aprox. 150.000 km), este genera entre un 60 % y un 70 % menos de emisiones de CO2 que la versión con motor de combustión interna, siempre que se utilice energía renovable durante su vida útil.